Imprimir

Buscan jerarquizar el rol de los maestros y directivos y darle autonomía a las escuelas en el diseño de los programas pedagógicos

Para renovar los proyectos pedagógicos de las escuelas primarias y darles cierta autonomía en la planificación de los métodos de enseñanza, la Provincia puso en marcha un plan de capacitación de directores, docentes y personal administrativo en 700 colegios de 17 de municipios. Se trata de una prueba piloto de un programa denominado "De escuelas a regiones", iniciativa que planean extender al resto de las 8500 primarias de la Provincia el año que viene.

En la Dirección General de Cultura y Educación afirmaron que conceptualmente el plan busca "poner la centralidad en la escuela, devolverle la autonomía y jerarquizar el rol de los docentes y directivos", ya que consideran que la planificación centralizada desde La Plata establece un "norte educativo" que cada escuela debe seguir, pero con las prácticas de enseñanza más eficaces de acuerdo a las realidades socioeconómicas y a la idiosincrasia de cada región en la que viven los alumnos.

En el comienzo del plan, el foco estará puesto en que cada escuela reelabore las prácticas pedagógicas para enseñar matemática y lengua a los alumnos de tercer grado (entre 8 y 9 años). Ese proceso será acompañado por un equipo multidisciplinario de la Provincia, por las inspectoras del distrito y especialistas de los distintos programas nacionales y provinciales de capacitación docente que ya existen.


La expectativa de la Provincia es que este plan sea el punto de partida para una renovación de los Proyectos Educativos Institucionales (PEI), que es la estrategia pedagógica individual que usa cada escuela para enseñar los contenidos obligatorios. "Hay muchísimas escuelas donde el PEI fue hecho en 2002 y por ahí lo siguen manteniendo", advirtió Alejandro Finocchiaro , director General de Cultura y Educación. Y luego resumió las expectativas que se trazaron al armar este programa, al que calificaron como un coaching para que las escuelas refresquen sus estrategias: "Apuntamos a reforzar el liderazgo del equipo directivo, establecer un tablero de gestión con objetivos cumplibles y concretos, y donde haya evaluaciones periódicas. El objetivo es ver en qué se falla para ver qué y cómo se puede mejorar. Y que la comunidad educativa sienta el proyecto como propio y lo lleve adelante".

En la prueba piloto, la Provincia trabajará en tres regiones educativas: la 6, que incluye Vicente López, San Isidro, San Fernando y Tigre; la 12, que abarca Arrecifes, Baradero, Capitán Sarmiento, Ramallo, San Nicolás y San Pedro; y la 15, que alcanza a 9 de Julio, Alberti, Bragado, Carlos Casares, Chivilcoy, Hipólito Irigoyen y Pehuajó. Según afirmaron en la Dirección General de Cultura y Educación se eligieron esas regiones porque los municipios que abarcan son gobernados por intendentes de distintos partidos políticos y porque las inspectoras mostraron receptividad al plan. Es que cada una de las 700 primarias alcanzadas en la primera etapa del plan tendrá un coordinador del programa y en la mayoría de los casos será una inspectora.

En la Provincia afirmaron que los intendentes de los municipios alcanzados por el programa acompañarán la iniciativa. De hecho, los jefes comunales podrían eventualmente hacer su aporte al plan, pese a que las escuelas son de jurisdicción provincial. Ocurre que el presupuesto que se dispondrá específicamente para el programa es muy acotado: apenas $ 220.000 para todo el semestre que queda. Ese dinero es para cubrir la asesoría del Centro de Estudios de Políticas Públicas, que trabaja en la concepción del plan, y los materiales didácticos. Por eso, de surgir alguna nueva estrategia pedagógica en una escuela y se requiera una inversión podrían ser los intendentes quienes cooperen con algún subsidio.

En la Dirección General de Cultura y Educación saben que al desembarcar con equipos multidisciplinarios en cada escuela para iniciar el plan surgirán reclamos y planteos de la comunidad educativa vinculados a problemas de infraestructura en las escuelas, aspectos que lógicamente repercuten en las estrategias pedagógicas. "Desde el 1° de marzo estamos haciendo un censo y ya tenemos relevados 8000 de los 12.000 edificios escolares. Y las condiciones no son buenas. El porcentaje de escuelas que está mal es alto. Pero justamente lo que queremos es que, salvo que nos encontremos con situaciones peligrosas a resolver inmediatamente, con este programa los directivos puedan salirse de la catarsis cotidiana. Porque cuando terminemos el censo, armaremos un plan de infraestructura a varios años. Pero en el mientras tanto tenemos que mejorar las prácticas educativas", concluyó Finocchiaro.

Javier Drovetto

www.lanacion.com.ar 15/06/16