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Decenas de trabajos de investigación están arrojando indicios valiosos sobre cómo mejorar el aprendizaje y el rendimiento escolar. Muestran que el desarrollo cognitivo y las habilidades de razonamiento no se dirimen sólo en el aula ni se fomentan sólo con nuevas técnicas pedagógicas.

Un trabajo recientemente publicado por Sebastián Lipina y su grupo de la Unidad de Neurobiología Aplicada de Cemic y el Conicet sugiere que la carencia de libros en la casa, no tener acceso a Internet y el escaso tiempo dedicado por los padres a leer cuentos a sus hijos están fuertemente vinculados con el bajo desempeño en pruebas cognitivas.

 

Mariano Sigman, jefe del Laboratorio de Neurociencia Integrativa del Conicet y docente invitado de la Universidad Di Tella, que el año pasado organizó un simposio internacional sobre neuroeducación, subraya que "una buena nutrición es una condición básica para el aprendizaje". Otro dato por tener en cuenta son los ritmos biológicos. "Particularmente en la adolescencia, se produce un desfase que hace que los chicos se duerman más tarde y se despierten más tarde. Se probó por distintas mediciones que en las primeras horas de la mañana los adolescentes están casi dormidos. Si bien es difícil cambiar el horario escolar, tal vez se mejoraría la disposición al estudio si al comienzo de la jornada se agruparan las actividades más recreativas y se dejaran para más tarde las que requieren más esfuerzo mental", explicó.

Otro trabajo de Fabricio Ballarini y colegas, que investigan en el Laboratorio de Memoria de la Facultad de Medicina de la UBA y el Conicet, mostró en más de 4000 estudiantes primarios, secundarios y universitarios una mayor consolidación en distintos tipos de memoria cuando una hora antes o una hora después del aprendizaje que se quiera fijar se brinda una novedad o una sorpresa que les cambie la rutina.

"Nuestros resultados muestran un aumento del 60% en el rendimiento si los docentes aplican esta estrategia", dice Ballarini.

Lo que miden las pruebas PISA y se espera de la escuela es que fomente el pensamiento racional. En este sentido, dice Pedro Bekinschtein, del mismo laboratorio, hay que tener en cuenta que existen dos sistemas cerebrales para tomar decisiones, uno más intuitivo y emocional y otro más analítico y racional. "Distintos factores pueden afectar cuánto se usa cada sistema en la resolución de un problema -explicó-. Uno, por ejemplo, es el estrés. Un poco de estrés puede ser estimulante y mejorar la performance cognitiva, pero mucho suele ser negativo y desplazar el sistema de toma de decisiones para el lado intuitivo (que es más rápido que el otro). El estrés también hace que las personas se focalicen más en lo inmediato y no en cuestiones de largo plazo."

Para Bekinschtein, la pobreza también tiene un impacto en la toma de decisiones. "Dos trabajos publicados en Science en 2012 y 2013 muestran que cuando no se pueden cubrir las necesidades básicas, las personas están privándose de las cosas que desean y esto afectaría la toma de decisiones y el foco de atención. Un chico con problemas de atención no siempre tiene un trastorno, sino que otros factores, como su situación socioeconómica, pueden estar afectando su comportamiento y desempeño cognitivo", afirmó.

Para Melina Furman, bióloga y doctora en Enseñanza de las Ciencias por la Universidad de Columbia, cuando uno mira las preguntas de las pruebas PISA resulta claro porqué no nos está yendo bien: porque evalúan capacidades de pensamiento crítico, tales como la habilidad de analizar datos complejos y sacar conclusiones, o la posibilidad de argumentar a partir de evidencias. "Se trata de estrategias centrales del pensamiento científico que son fundamentales para ejercer una ciudadanía plena, pero que están muy lejos de lo que hoy se enseña en las escuelas", explicó.

Aunque reconoce que la cuestión de cómo hacer para formar chicos que puedan resolver problemas no específicos no está resuelta, Sigman destaca que algo importante es concentrarse no sólo en los resultados, sino también en los caminos que llevan a encontrarlos.

Por Nora Bär

www.lanacion.com.ar  09/12/13